Las tecnologías de comunicación tienen una inmensa gama de aplicaciones en las políticas de seguridad. Son el canal a través del cual circulan todas las instrucciones e intercambios de datos e información sobre el cual se toman decisiones y es donde se enlaza la infraestructura operativa de toda institución gubernamental responsable del mantenimiento, la protección y el monitoreo de: instalaciones estratégicas (aeropuertos, puertos marítimos, carreteras, plantas de energía, sistemas hidráulicos o presas, centros de control, comunicación y comando, entre otros) y las agencias de policía, seguridad, protección civil, atención a emergencias y todas aquellas áreas que dependen de comunicaciones de misión crítica.